empresas de destruccion de papel

En los tiempos que corren, los negocios u oficinas que desean desechar una gran cantidad de documentos, los cuales ya no les resultan útiles, contratan a empresas de destrucción de papel de diferentes categorías. De ahí, que estas deben garantizar la confidencialidad de la información contenida, puesto que pueden afectar legal o económicamente al cliente en cuestión. Por lo tanto, en Europa la LOPD respalda dicha actividad.

Una empresa responsable y formada por profesionales, garantiza el correcto manejo de los documentos a triturar; limitándose además al acceso que le permita el cliente. Esto no implica que pueda conocer los datos descritos en las hojas en cuestión. Por ejemplo: facturas, balances contables, cotizaciones, formulaciones, currículos, minutas, instructivos, contractos, etcétera. Lo antes expuesto, es recomendable que esté establecido en un certificado de confidencialidad.

De igual manera, dicha empresa debe utilizar métodos de destrucción que no afecten al medio ambiente; por tal razón, la técnica más usada es mediante máquinas de trituración, las cuales son rápidas y fáciles de operar. Así mismo, hay quienes también se dedican a la eliminación de archivos digitales, donde es importante tener un amplio conocimiento en informática, para hacer una correcta limpieza de las memorias y disco duros.

Cabe destacar, que el objetivo de la destrucción de documentos se atribuye a tres fuertes razones: desechar material que no agrega valor, minimizar la tala de flora y recuperar parte de la fibra que constituye la materia prima del papel. Actualmente, el tema ambiental es muy frecuente, lo que se asocia a que este se ha visto afectado negativamente por la contaminación de las actividades industriales del hombre, repercutiendo, a su vez, en la vida de animales y plantas.

Por lo tanto, han surgido una serie de empresas dedicadas a la destrucción de papeles, para posteriormente ser sometidos a un proceso donde se extrae parte de las fibras. Es importante añadir que, aunque el uso de este material ha disminuido por la era tecnológica, las estadísticas indican que no podrá ser erradicado, puesto que hay documentos de carácter legal, cuya autenticidad se valida con sellos y firmas en físico.